El sector de la construcción, la ingeniería y la arquitectura perderá alrededor de 8.700 millones de euros de producción en 2020 como consecuencia del impacto de la pandemia por Covid-19, lo que equivale al 4,7% de los 184.200 millones estimados. Asimismo, la crisis sanitaria propiciará que se destruyan 66.951 puestos de trabajo en el presente ejercicio. Así lo concluye el análisis elaborado con la calculadora específica del sector diseñada por las Asociación Madrid Capital Mundial de la Ingeniería, Construcción y Arquitectura.

Esta organización, constituida el pasado mes de marzo, con el objetivo de potenciar Madrid como referente mundial de infraestructuras, está integrada por el Ayuntamiento de Madrid, el Instituto de Comercio Exterior (ICEX), el Instituto de Crédito Oficial (ICO), FCC, Sacyr, Acciona, Cesce (Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación), Distrito Castellana Norte, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (CICCP), el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) y el Foro para la Ingeniería de Excelencia (Fidex), entre otras entidades e instituciones.

De acuerdo con las estimaciones de la Asociación, desde que se decretó el estado de alarma en España el pasado 14 de marzo, la construcción, la ingeniería y la arquitectura han perdido de media 150 millones de euros diarios como consecuencia de la ralentización y suspensión de los proyectos. Organismos como Adif han visto afectados más del 80% de sus proyectos de construcción en las últimas semanas. Además, cabe recordar que entre el 30 de marzo y el 9 de abril, el Gobierno obligó a la paralización total de las obras mediante un permiso recuperable retribuido.

El impacto económico de la crisis ha variado en función de las modificaciones introducidas por el estado de alarma, que se divide hasta la fecha en cuatro etapas. Así, entre el 14 y el 29 de marzo, el sector ICA (ingeniería, construcción y arquitectura) sufrió una caída de la producción del 30%, equivalente a 2.300 millones y con 404.000 trabajadores afectados. Entre el 30 de marzo y el 8 de abril, coincidiendo con la denominada "hibernación económica", el sector registró un descenso del 60% (3.080 millones y 783.000 empleados), sustanciado principalmente en la construcción de proyectos, toda vez que los servicios de ingeniería y arquitectura mantuvieron su actividad.

Desde que se levantó esa situación y se pudieron retomar los trabajos, con todas las medidas de seguridad, el recorte en la producción alcanza el 20% en promedio (2.570 millones y 427.000 trabajadores afectados), un porcentaje inferior al de la primera etapa debido a la disminución de la incertidumbre en la reactivación de proyectos. Y ya desde el 26 de abril, el sector se halla "en una aparente normalidad", con una bajada del 10% (760 millones y 142.000 empleados) de la actividad estimada hasta el 10 de mayo, cuando se prevé que finalice el estado de alarma.

El sector proyectaba producir 184.200 millones en 2020, equivalentes al 8,2% del total nacional, y 1,43 millones empleos, el 7,3%. En las condiciones actuales, la perspectiva es que se sitúe este año en 175.500 millones y 1,36 millones de puestos de trabajo.

El sector de la construcción se erige en motor fiable para la recuperación económica y demanda al Gobierno, además de anticipos en los pagos para esta coyuntura, planes de inversión de colaboración público-privada a largo plazo en infraestructuras. La Asociación Madrid Capital Mundial de Ingeniería, Construcción y Arquitectura advierte de que su recuperación podría verse afectada por el deterioro del tejido productivo, la suspensión de proyectos por falta de financiación y la caída en el número de licitaciones públicas y privadas.

Fuente: Eleconomista.es